viernes, 30 de abril de 2010

Los pastores y su ejercito (cap 18)

Iba saliendo yo de la venta mas debil que quien sabe que y mi amo me vio. Yo pense que me iba a decir s estaba bien o si necesitaba algo pero no lo que me dijo fue que sin duda este castillo estaban encantado y que aquellos que habian jugado con migo eran hombres encantados y que no se pudo levantar de Rocinante por el mismo encantamiento. Yo de la colera que me dio le dije que todo esto era mentira que esos hombres estaban encantados y que eran de carne y hueso y que hasta dijeron sus nombres. Ademas le dije que era mejor que ya no siguieramos con estas aventuras porque la verdad no nos train nada bueno. Cuando le termine de decir esto se enojo todo con migo y me dijo que nada que ver que yo no conocia nada y me dijo que me prometia que nos pasarian mejores cosas y continuamos con nuestro camino. Seguimos hablando mientras caminabamos cuando nos encontramos con una polvareda que cuando mi amo la vio dijo que era un gran ejercito y se emociono todo. Yo le dije que entonces aquella otra polvareda que venia entonces era otro ejercito. Me dijo que teniamos que ayudar a los menesterosos y yo le hice caso con tal de que esta vez ganara algo. Me dijo que debia atar a mi jumento porque talvez de esta guerra ganariamos excelentes caballos.

Nos fuimos a una loma donde se podian ver los dos polvaderas que venian. Me emocione tanto porque parecia una operacion en cubierto pero me dio lastima por mi burro porque si conseguia un caballo mejor que haria con el. Desde la loma comenzo a nombra a un sin fin de caballeros que venian de los dos ejercitos, nombres que yo nunca habia oido. Tambien nombro un sin fin de nacionalidad que yo me quede con la boca abierta pero apesar de todo lo que nombraba no podia ver nada asi que pense que el diablo de los encantamientos de ayer nos estaba siguiendo. Le dije que no veiai nada y el me dijo que todo era culpa del miedo que me hacia ver otras cosas. Yo le dije que no eran mas que ganado y unas ovejas pero el no me creyo y cuando lo vi fue que se monto en Rocinante y comenzo a galopar con su lanza listo segun el para matar a todos los que se le cruzaran. Cuando vi fue que empezo a embestir a todos las ovejas y los pastores le gritaban que no. Yo pense que iba a recapacitar cuando los pastores le dijeran esto pero no siguio luchando contra los supuestos soldados y cuando vi fue que los pastores cogieron piedras y se las tiraban.

En esta parte mejor me tape los ojos pero lo peor fue que cuando los abri mi amo estaba tirando en el suelo medio muerto y los pastores ya se iban. Baje rapido para ver como seguia pensando: te lo dije. Cuando llegue le dije que porque no me creyo que como le habia dicho era puras ovejas y el seguro para no quedar mal me dijo que era el diablo que los habia encantado. Me dijo que los siguiera para que viera como se transformaban de nuevo en hombres pero que despues porque ahora me necesitaba. Me pidio que le revisara la boca a ver cuantos dientes le hacian falta. Parecia que don Quijote me iba a comer porque mis ojos practicamente estaban dentro de el. Y no saben lo que me paso que me dio tanta pena. Mientras le revisaba la boca vi que salia un liquido y dije di ya se me esta muriendo esta vomitando sangre pero al revisarlo mejor me di cuenta que era el brebaje entonces me vomite encima de el. Me dio tanta pena que sali corriendo por los pa;os para limpiar. Cuando llegue a mi jumento para coger todo lo necesario vi que todo estaba en las alforjas que se habia dejado el ventero. En ese momento senti una tristeza que ustedes no saben. En ese momento queria renunciar a todo e irme para mi casa. No me importaba si no me daban la insula pero simplemente estaba harto ya que habia perdido todo. Por dicha mi amo vino y me detuvo diciendome que el bien para nosotros ya estaba cerca y que no me preocupara por el. Cuando le conte sobre las alforjas reacciono medio enfadado y se preocupo por la comido pero le dije que el la podria encontrar con sus instintos. Despues de esto me dijo otro mensaje bastante animador y me dijo que los caballeros andantes tiene que saber de todo. Seguimos hablando y le revise la boca, y de tener cinco o cuatro muelas ahora tenia dos y en un lado ni media. Me dijo que esta vez escogiera yo el camino que seguir para encontrar posada y esto la verdad me alegro porque al fin iria al mando. Durante el camino le fui diciendo varias cosas para ver si se divertia porque la verdad me daba bastante lastima verlo asi a pesar de las burradas que haya hecho hoy.

jueves, 29 de abril de 2010

Locura en la venta II parte (cap 17)

Despues de un rato de estar tendido en el suelo mi amo me pregunto que si estaba dormido y yo le respondi que obviamente no y que como iba a dormir con estos dolores. Honestamente estaba bastante enojado hoy los diablos y los problemas me han dado persiguiendo por too lao. Despues me dijo que me iba a contar algo pero que tenia que jurar que no le iva a decir a nadie. Se lo jure como tres veces y le dije que hasta que el se muriera lo contaria y al fin me conto. Me dijo que este castillo estaba encantado y que todos lo que nos habia pasado habia sido culpa de un moro que estaba encantado. Esto me dio bastante miedo. Le reclame que a el el moro le habia puesto al menos un rato en sus manos a una doncella hermosa pero que a mi no me habia dado nada sino como mil golpes y nada bueno. Le grite que nunca iba a ser caballero andante y en ese mismo instante me dieron ganas de devolverme a mi casa porque ya estaba harto de esto pero me quede por dos razones. La primera porque no sabia como devolverme y la segunda fue que el pensamiento de la insula me hizo quedarme y la verdad espero que me la den pronto. Despues de esto entro un se;or con muy mala cara y tal era el miedo que me habia metido mi amo que pense que era el moro encantado y se lo dije a mi amo pero el me dijo que no que los moros no se dejaban ver. Llego a hablarle a mi amo pero este le contesto de muy mala forma asi que el supuesto moro cogio el candelabro que tenia y le
pego en la frente, lo hubiera defendido pero todo me dolia tanto que mejor ni me movia mas para que no se me pusiera mas fea la cosa. Despues de que se fuera mi amo me dijo que sin duda ese era el moro. Me mando a traer varios ingredientes para hacer su supuesto brebaje y yo con tal de que tambien me dieran a mi para mejorarme fui a pedirle al ventero. Encontre a un se;or y se lo pedi a el que no era el ventero porque despues lo llamo y le pidio los ingredientes a el. Por dicha me los dieron porque estaba bastante ancioso. Cuando se los di a mi amo este los mezclo y los cocino hasta que segun el estuvieron en su punto. Cuando estuvieron listos los puso en un contenedor raro que no sabria decirles que era. Despues comenzo a decir un monton de oraciones y a segun el bendecir el brebaje. La verdad esto no me parecio muy bien, esto de bendecirlo debe hacerlo un sacerdote o alguien que deverdad este capacitado y no un caballero andante nada que ver pero diai que se puede hacer es don Quijote. Cuando ya estaba listo decidio tomarselo y se tomo un monton yo no se como no se ahogo. Y cuando veo que le nada cuando termino de tomarse todo comenzo a vomitar que aquello parecia un tubo y le dio un sudor que lo primero que mando a hacer fue que lo arroparan y que lo dejaran solo. Esto me parecio en parte bueno porque al fin iba a poder descansar un poco de mi amo porque aveces me tenia harto. Durmio como por unas tres horas y yo pude descansar un gran rato y lo mas que hice en esas tres horas fue hablar con el ventero y su esposa un rato.

Despues de que se despertara lo vi tan pero tan bien que lo que hice fue pedirle un poco de su brebaje y pense: ¡al fin me voy a sentir bien! Pero nombres nunca mas en vida vuelvo a tomar un brebaje asi y ya les voy a contar porque. Justo cuando termine de tomarmelo me comence a sentir tan pero tan mal que pense que me iba a morir, ustedes no saben como me sentia y la verdad no le deseo esto a nadie solo a los yangueses que nos golpearon en la aventura pasada. Despues de sentirme tan mal me dijo don Quijote que era porque yo no habia sido armado caballero entonces con una furia le grite que entonces porque me lo habia dado pero en esto se me vino una vomitadera que como mi amo parecia un tubo. Sudaba tanto y vomitaba tanto que yo y los demas pensamos que estas eran mis ultimas horas. Este vomito me duro como por dos horas y a mi amo ni le importo que me sintiera asi que apenas que termine me dijo que nos fueramos en busca de mas aventuras y esto me dio una chicha. Pero no tuve otra opcion mas que irme con el. Cuando ibamos saliendo vi que mi amo le agradecio al ventero y le dijo que si le podia vengar de alguien o de algo que le habia hecho da;o. El ventero le dijo que lo que ocupaba era que le pagara pero el le dijo que ningun caballero andante jamas habia pagado una estadia que siempre eran regaladas por todo lo que pasaban y hecho a correr ni siquiera importandole que yo estuviera ahi. Cuando vi que salio corriendo y el ventero me volvio a ver a mi pense ahora si se armo la gorda pero no no tuve miedo y dije si mi amo no pago yo no pago pero esto fue lo pero que pude haber dicho. Me cogieron y cogieron una manta y me comenzaron a lanzar por los aires. Al principio me quejaba despues les gritaba luego les amenazaba y por ultimo les rogaba. Tales eran mis gritos que mi amo volvio pero no hizo nada ya que cuando me dejaron de tirar era porque ya estaban cansados. Me pusieron en mi burro y Maritones muy agradecidamente me dio agua. Mi amo me dijo que no bebiera de eso sino del brebaje pero le hize unos ojos y le dije que no que como no era caballero no lo iba a tomar. Maritones tambien muy agradecidamente me regalo un poco de vino que me supo delicioso. El ventero se dejo las alforjas como pago pero la verdad no me importaba, lo unico que me importaba era irme de ahi y seguir nuestro camino.

miércoles, 28 de abril de 2010

Locura en la venta I Parte (cap 16)

Cuando entramos a la venta ya estaba harto de don Quijote diciendo que era un castillo porque yo tenia la razon. ¡Era una venta! Por dicha que el ventero nos interrumpio y hizo que el quijote se callara. Me pregunto que que le habia pasado pero me parecio muy feo decirle lo de la paliza porque di era dejarlo como un mentecato completo. La verdad me daban ganas porque me habia hecho pasar cada cosa. Pero no, un escudero debia ser leal a su amo asi que dije que se habia caido por una pe;a ya que fue lo mejor que pude pensar. Ademas del ventero estaba su esposa, su hija que era muy bella y una moza que mejor les digo la verdad... era muy feita. Pero a pesar
de que no era muy atractiva era muy gentil y ayudo a la doncella (la hija del ventero) a hacer una cama. Pues dejenme decirles que la cama era la verdad una cochinada hasta la de un arriero que estaba durmiendo a la par nuestra era mejor. Don Quijote se acosto en ella y de seguro ni le importo porque como el esta en su mundo seguro penso que era una cama ultimo modelo o algo asi. Cuando estaban curando a mi amo la doncella y la moza vieron los golpes que tenia don Quijote y ya esta pense yo ya se nos fue el cuento pero les dije que es que la pe;a tenia muchos picos y tropezones y que entonces le habian dejado sus marcas. Por dicha me creyeron porque sino se nos hubiera ido todo al basurero. Vieron como a pesar de no saber leer me las juego. Tambien le dije que por favor dejara un poco de lo que le estaban poniendo a mi amo porque la verdad a mi tambien me dolia mucho todo el cuerpo. Para no quedar mal yo tampoco dije que del susto por lo de mi amo que me quedo doliendo todo. La verdad no se si me creyo pero ojala que si.

Despues de todo esto la moza que se llamaba Maritones me pregunto que como se llamba este caballero y ya le respondi y todo y lo peor fue que despues me pregunto que que era un caballera andante y yo me quede impactado con esto asi que le explique. De la nada mientras estabamos hablando don Quijote se levanto y seguro para no quedar atras empezo a decir que el por siempre le iba a agradecer a las doncellas y un monton de cosas mas. Las doncellas se quedaron como raras seguramente no entendieron muy bien lo que dijo mi amo. Despues de esto Maritones me curo y me senti mucho mejor. Algo que me dio colera fue que a mi no me dieron cama sino que me tuve que acostar en el piso con una estera de enea y una manta pero diai algo es algo.

Vieran como me costo dormir con este dolor de costillas pero me logre dormir. Estaba so;ando con mi insula y que estaba jugando en los grandes pastos con mis hijos y comiendo un gran festin cuando de repente so;e que un soldado me habia traicionado y se me habia tirado encima para matarme asi que le di unos cuantos golpes. Cuando ya pense que lo habia vencido recibi unos golpes y me desperte y me di cuenta que no era un sue;o que estos golpes eran verdad. Asi que agarre al que me estaba dando que la verdad no supe quien era y comenzamos a darnos. El ventero tambien se metio a la pelea y la verdad me estaba ayudando pero tambien a mi me estaba danto el arriero asi que no que deje y segui peleando. Cuando de la nada se oye un grito de que un hombre estaba muerto y cuando veo que era la santa hermandad y pense a la grande ya esto se puso feo. Por dicha no habia nadie muerto solo era don Quijote ahi tirado. Cuando se grito esto todos salieron corriendo a sus aposentos y yo quede tirado ahi ya que tal era el dolor que no me podia mover.

domingo, 25 de abril de 2010

Capitulos 14 y 15

Vivaldo comenzo a leer la cancion que la verdad me parecio muy intensa pero que al final casi me duermo porque era bastante larga y ademas tenia hambre. Cuando se termino de leer la cancion aparecio Marcela. Eso si me desperto porque todos los relatos eran ciertos su belleza era incomparable, ojala esto no lo lea mi esposa. Ambrosio le dijo algo que yo siento que fue muy descortes y mas con tal bella mujer. Despues paso algo de lo que a mi no me gusta, las habladas porque simplemente no van al grano. Bueno Marcela dijo una explicacion de porque no la debian culpar a ella que creo que fue muy convincente. No lo voy a contar todo porque me da una pereza escribirlo que mejor les cuento el punto, justo como a mi me gusta. Lo que Marcela dijo es que ella no tenia la
culpa, ya que ella nunca le habia dicho que si a un hombre, y nuestro difunto pastor no fue la excepción entonces que en realidad ella no tuvo la culpa. Como les dije me parecio convincente porque si le dijo que no, no tuvo porque haber muerto ni de celos ni de sospechas ni de nada parecido asi que Marcela es inocente. Cuando Marcela termino se fue por el bosque. Yo pense que ya todo se iba a arreglar cuando este bombeta de mi amo en su caballo grito que nadia la siguiera o se meterian con el. Yo creo que le hicieron caso porque nadie la siguio. Despues de todo este alboroto enterraron al muertito y se despiderion de el. Le fui a dar el pesame a Ambrosio y este me lo recibio con mucho cari;o. Nos despedimos de todos y le ofrecieron a mi amo ir a Sevilla pero por dicha dijo que no porque no tenia ganas de viajar, solo queria comer y dormir. Pero despues me percate de porque no acepto. Decidio seguir a Marcela para supuestamente ofrecerle sus servicios, en ese momento pense en decirle: y dulcinea que pero era mejor ser cortes con el para que no se enojara. Nos pusimos en marcha yo siempre pensando cuando me daran mi insula.

Caminamos como dos horas tratando de buscar a Marcela pero no vimos ni siquiera una huella de ella. Pero apesar de esto nos paso algo muy bueno. Llegamos a un prado lleno de hierba y donde habia un rio que se veia tan fresco que decidimos descansar ahi. Dejamos a Rocinante y a mi jumento que descansaran y comieran un rato hierba y nosotros nos pusimos a comer y luego nos dormimos. Estaba durmiendo placenteramente y so;ando con mi insula cuando nos despierta Rocinante. Resulta que unos llangueses le estaban pegando porque habia tratado de cortejar a unas lleguas. Rocinante tiene una debilidad por las lleguas que nos causo un problemon que no se imaginan. Don Quijote me dijo que teniamos que ir a defenderlo y cuando llegamos para tratar de defenderlo nos dieron una paliza que terminamos tendidos en el piso, por dicha los llangueses eso se fueron. Ojala les caiga una avalancha encima. Mientras estabamos ahi en el piso le pregunte a mi amo que si tenia de ese balsamo pero me dijo que no y que lo conseguiria en dos dias o algo asi no me acuerdo. El puso la excusa de que el no tuvo que haber luchado contra ellos sino que tuve que haber sido yo ya que ellos no eran caballeros. Pero mi amo no me entiende yo soy un hombre pacifico y no un hombre de guerra. Tambien me dijo que hasta los mejores caballeros habian tenido sus malos momentos y que habia que seguir adelante a pesar de las heridas. Cuando terminamos de hablar nos levantamos a pesar de todos los gritos y suspiros que tuvimos que pegar y don Quijote se subio a mi jumento y nos pusimos a ver si encontrabamos un lugar donde pasar la noche porque se hacia tarde y estaba muy cansado. Gracias a mi Dios encontramos una venta que mi amo de terco me decia que era un hermoso castillo y discutiendo acerca de esto entramos a la venta.

Capitulo 13

Estaba durmiendo tan placenteramente cuando de repente los cabreros vinieron a despertar a Don Quijote para ver si iva ir al funeral y el me desperto a mi para que le alistase todo para ir al funeral. Lo hice como con emocion porque queria saber mas sobre ese pastor. Cuando ya todo estaba listo comenzamos nuestro camino, disfrute del paisaje pero tenia hambre. Despues de caminar un poquito nos topamos con unos pastores, dos hombres a caballo y tres o cuatro mozos no me acuerdo bien. Se saludaron con los cabreros, yo sinceramente ni los conocia pero no les di importancia y resulta que iban para el entierro tambien asi que nos juntamos. A mi me ignoraron por completo esos malditos, y lo peor fue que despues comenzaron a hablar con mi amo y tambien me ignoraron. Ojala se los coma una boa. Bueno ahi oia yo que hablaban con mi se;or y discutian acerca de la caballeria andante y de los amores de los caballeros hasta oi algo sobre encomendarse a Cristo, que yo la verdad si me encomendaria a el. No se porque los pastores y los cabreros y todos los otros se le quedaban viendo con cara de y este que yo sabia que el estaba diciendo la verdad, aunque eso de Dulcinea no se si era verdad porque yo nunca habia oido de alguien asi en la Mancha mi patria querida. Mientras seguian hablando se vio a lo lejos unos pastores bajando de la monta;a y eran los que train al cuerpo y lo llevaban para donde el queria ser enterrado porque supuestamente ahi fue donde conocio a su amada y donde la vio x ultima vez, que cursilerias por dios, se imaginan yo enterrado donde vi a mi esposa nombres. Ahi estaba un tal Ambrosio que habia sido como el mejor amigo del difunto. Enrealidad me sentia triste por el muerto y cuando volvi a ver don Quijote estaba hablando de los textos del difunto que al final un tal Vivaldo, el mismo que venia discutiendo con mi amo, se dejo algunos, entre ellos una tal Cancion desesperada que dijo Ambrosio que habia sido el ultimo texto del muerto. Vivalde o Vivalda como sea lo comenzo a leer.

Capitulo 12

Justo en el momento cuando ya me iva a dormir entro un mozo que yo pense que solo iba a dejar algo pero que en realidad venia con un chisme de la ciudad. Se lo empezó a contar a los cabreros y don Quijote ya estaba con las orejas paradas a ver que escuchaba aunque solo le funcionara bien una. Cuando el mozo termino su historia don Quijote de vino le pidio al cabrero que le contara la historia. Lo peor fue que el cabrero le dijo que si y yo me tuve que aguantar a esto. De ahora en adelante al cabrero le vamos a decir Pedro porque cabrero es una palabra dificil para mi. Bueno como les estaba contando Pedro le comenzo a chismear con mi amo. Honestamente hablando parecian viejillos de patio. Por dicha yo no me incluia entre ellos aunque si escuchaba algunas partes de la historia. Don quijote le parecia interesante todo y le pedia mas y mas. Pero aqui entre nos Pedro tenia un vocabulario, que ni el mio es as y por dicha don quijo se lo corregia. Al final yo ya estaba harto de tanta habladera, y lo que pude entender de la historia fue que era de un intelecutal que se enamoro y se murio. Aqui se nota el poder de las mujeres, sin mencionar el de mi esposa que vieran como me tiene amarrado a ella. Bueno por dicha ya el cabrero le dijo al quijote que se fuera a dormir porque ocupaba descanso para ma;ana y ademas por su oreja a lo que yo sonrei porque menesteraba un buen sue;o. Me acomode entre mi jumento y Rocinante y vamonos hasta el proximo dia.

domingo, 18 de abril de 2010

Capitulo 11

Este dia me desperte con un dolor de espalda que mejor ni les cuento. Dormí mas o menos porque dormir en ese lugar no es para nada fácil y mas con los ronquidos de este hidalgo. Ya cuando nos despertamos los cabreros nos invitaron a comer. Pero solo le pusieron silla a don quijote y a mi me dejaron ahí de pie. Ojalá viniera un dragón y se los coma. Por dicha mi amo fue gentil y me invito a sentarme. Pero la verdad pensando bien prefería comer en otro lado para comer como yo quiera porque a mi de educación y modales que ni me hablen. Pero el necio siguió diciendo y me tuve que sentar (con el cuento de que un escudero es igual que su amo y mas hablada). Note que los cabreros no entendian mucho pero no es mi problema así que comencé a comer. También pusieron unas bellotas que estaban deliciosas. Cuando comencé a comer don quijote, como siempre creyendo poeta, se hecho una hablada que duro mas diciendo su discurso que comiendo su cena. Por dicha yo me hice el loco y los cabreros se quedaron bastante extrañados pero yai quien lo tiene a el. Ya terminando la charla y todo los cabreros nos dijeron que venia un amigo dellos y que quería que lo oyéramos cantar. Solo esto me faltaba, primero la charla de mi amo y ahora un concierto, no no que empleo. Bueno el cantante llego rapido y comenzo a cantar. Yo, fingiendo esta feliz, estaba deseando que terminara. Que canción mas cursi por Dios. Y cuando termino no va pidiendo don quijo otra, y yo como no y por dicha no la pidio porque sino me hubiera pegado la cabeza contra la pared porque me tenia un sueno que no era jugando. Le dije que se acomodara para dormir un rata pero el siempre jugando de muy macho me dijo que los caballeros velaban y no se que mas. Antes me pidió que le curara la oreja porque le dolía mucho pero por dicha un cabrero dijo que el haria una medicina porque yo ya estaba muy cansado.

martes, 13 de abril de 2010

Capítulos 9 y 10

Por dicha me pude despertar después de esa golpiza de esos malditos mozos. Ojalá alguien les de su castigo. Bueno después vi que mi amo seguía peleando con el vizca. Primero el vizcaíno lo lastimo y le lastimo la oreja esto me puso de malas y me dio lastima el pero no le fui a ayudar porque me había dicho que nunca lo ayudara si peleaba con otro caballero, bueno salado el. Pero por dicha alguien ahí arriba me lo quiere bastante porque no se de donde saco fuerzas y empujo al vizcaíno y cuando lo vi fue en el suelo sangrando. Pensé que lo iba a matar así que le pedí a todos los santos que me había enseñando el cura que si moría que lo llevara al cielo. Creo que esto del caballero se le esta saliendo de las manos, definitivamente no es el mismo hidalgo que pasaba en su casa leyendo, ahora estos benditos libros se le subieron a la cabeza. Ven los beneficios de no saber leer y eso que mi esposa siempre se queja de que tengo que aprender y ya me tiene hasta la coronilla. Bueno ya siguiendo con la supuesta gran salvación de estas princesas don Quijote no mato al vizcaíno por que las doncellas le pidieron que no lo hiciera y el acepto pero diciendo que tenia que ir al Toboso a visitar a Dulcinea, y dale con esta mujer que seguro es mas fea que una cabra pero el la ve mas bella que el arco iris. Bueno después de todo esto ya entramos a un bosque y seguimos caminando y yo emocionado de que seguro ya me iban a dar la ínsula y este otro me dijo que no que esta no era batalla para ganar terrenos ni nada de eso, así que me puse triste. Pero diai hay que seguir verdad. Mientras caminábamos empece a pensar en lo que hizo mi amo y me dio miedo que nos atrapara la hermandad pero según el a ningún caballero le ha caído nunca la justicia y bla bla. Entones seguí medio tranquilo. Después me dijo que paráramos para comer y descansar, ademas de que la oreja le dolía mucho. Antes de comer saque un poco de ungüento para ayudarle a cocerle la oreja y me hablo de un bálsamo que todo lo curaba y que el se lo sabia de memoria, resulta que ahora también era doctor. Me dijo que todo lo curaba y cuando el estuviera desecho por batalla solo se lo daba y listo. A mi me dio tanto miedo de ver esta escena que casi renuncio a la ínsula pero me dijo que el bálsamo no costaba nada y que era fácil hacerlo. Entonces le dije que no había tiempo que perder que me lo enseñara, tal vez podía sacar algo bueno de esto ademas de la supuesta futura ínsula. Pero me dijo que debía tener paciencia que ya me lo enseñaría. Después de esto estaba diciendo que iba a vengarse del vizcaíno pero yo le dije que si iba al Toboso a visitar a "Dulcinea" no se tenia que vengar y hasta que al fin estaba de acuerdo con migo, yo creo que fue la primera vez, después de hablar nos pusimos a comer. No tenia mucho solo un pan, queso y una cebolla y le dije que esto no era una cena para un gran caballero para ser brocha un rato y se hecho otra gran hablada que mejor ni les cuento para no aburrirlos, al cabo que aveces ni le entendía porque hablaba como si fuera el poeta quien sabe que. El punto fue que los caballeros no comían por meses y que era algo honorable y que debía comer hierbas y frutas del campo y otro montón de cosas, pero yo para no parecer grosero siempre le contestaba de buena manera. Cuando terminamos de comer seguimos caminando a ver donde dormíamos y si lográbamos llegar al pueblo. No pudimos y entonces tuvimos que dormir a la par de unas chozas de unos cabreros. Don Quijote estaba feliz de dormir al aire libre porque así probaba mas su caballería o algo así. A mi me pareció bastante incomodo, pero diai tuve que. Esa noche pensé en dos cosas, la primera en Rocinante y que debe pensar el acerca de este hidalgo y después pensé en mi familia y como estarán luego caí dormido.

sábado, 10 de abril de 2010

Capítulos 1 - 8

Soy Sancho, soy un labrador que vive en la Mancha y soy vecino del hidalgo Alonso Quijana y les voy a contar mis aventuras con este hidalgo. Todo comenzó una noche en la que vi al cura y al barbero haciendo una fogata inmensa con un montón de libros que por cierto el barbero no me agrada. Esto me pareció muy bruto ya que me los pudieron haber dado a mi o a otras personas para leerlos aunque con costos leo una pagina. La verdad no sabia porque lo hacían. Después de esto me fui a mi casa para dormir porque venia de mi trabajo y estaba cansado. Antes de ir a dormir fui comer un poco, la verdad un pocote, porque no me puedo dormir con el estomago vacío. Después de unas lunas fui a visitar a mi vecino porque había oído que estaba muy mal. Al llegar lo encontré en un estado, que no desearía estar así que Dios me cuide. Alonso estaba deprimido y sin animo. Luego de hablar un rato y contarme su historia, me pidió que fuera su escudero (o algo así) y que fuéramos a buscar aventuras por el mundo y a salvar personas que ocupen ayuda. Pero Don Quijote (que así se decía llamar el) me prometio que me haría gobernador de una ínsula que el mismo conquistaría para mi. Después de que me dijo esto cambie de opinión ya que me imaginaba a mi, a mi esposa y a mis hijos felices viviendo en un castillo, así que acepte ser su escudero. Entonces en la madrugada, yo sin decirle nada a mi esposa e hijos para no preocuparlos me fui con el caballero don Quijote a buscar aventuras y a pasear por el mundo.

Mientras íbamos caminando, don Quijote me explico varias cosas como lo de la ínsula y que yo
no podía ayudarla mientras peleaba contra otro caballero. Después de caminar vario rato llegamos a un campo lleno de molinos, la vista era muy bonita. Pero de la nada Alonso me empezó a decir: "esta en sin duda una gran aventura, Sancho te mostrare mi fuerza y astucia al vencer a estos gigantes". Yo tratando de hacerlo razonar le explique que no eran mas que simples molinos de viento, pero el decía que eran gigantes y que las aspas eran sus grandes manos una pura hablada que aveces ni yo entendía. Pero siguió de terco y cuando lo vi fue que se monto en su rocín y comenzó a cabalgar. De repente había chocado contra el molino y su lanza se había roto, el y Rocinante estaban tirados en el suelo. En ese momento pensé en decirle: te lo dije pero se podía enojar conmigo y no hacerme gobernador mas tarde. Cuando se puso de pie me dijo que había sido el mismo brujo que se había llevado sus libros el que había convertido a los gigantes en molinos seguramente para no quedar mal, en esta parte me contuve un poco la risa porque me pareció muy tonto. Yo por no contradecirlo solo lo ayude y seguimos nuestro camino. Cada vez me parecía mas cuerdo este bendito hidalgo.

Mientras caminábamos le comente mas sobre mi futura ínsula. Al cabo de otro rato nos encontramos frente a un carruaje el cual llevaba a una princesa adentro y dos frailes adelante que nada tenían que ver con el carruaje. Sin embargo, mi amo dijo y juro que era que llevaban capturada a esa princesa así que según el se fue a defender a la princesa. Ya sinceramente estaba cansado de estas aventuras pues solo dejaban cosas malas y yo creo que este hidalgo simplemente se quiere hacer el héroe. Pero no importa todo esfuerzo tiene su recompensa porque voy a ser gobernador de una ínsula, que emoción y al fin voy a poder comer todo lo que quiera de todos modos esta aventura para mi fue muy breve ya que apenas fui a recoger las pertenencias del hombre que mi amo habia tirado, ya que el me explico que lo debía hacer, vinieron dos mozos que aunque les explique lo que hacia creyeron que estaba desnudando al fraile y me dieron una paliza. Lo ultimo que recuerdo es a mi amo peleando contra un vizcaíno y encomendando a su amada, Dulcinea.